Bodas de Lata
Revista Parabrisas Nro 195. Enero de 1995
Este monovolumen celebra los diez frutíferos años del matrimonio Renault - Matra
Hace una década, Renault y Matra abrieron el campo de los monovolúmenes con el Espace. Ahora, para festejar este aniversario, concibieron un verdadero Fórmula 1 de cuatro plazas. En él, se combinan un chasis y una carrocería especiales con el motor V10 de 3.5 litros tricampeón del mundo de Fórmula 1 con el equipo Williams. Primero se ubicó al V10 en posición trasera central. Luego, se reforzó el piso del Espace con un túnel central de fibra de carbono para transmitir correctamente toda la potencia (que se mantiene en reserva). En su extremo está acoplado el conjunto motor - caja derivado del chasis FW14 de Fórmula 1. La caja de cambios, semiautomática con seis velocidades, posee comando secuencial en el volante y el acelerador es electrónico.
Las enormes tomas de aire en su frente lo hacen ver muy agresivo. Con cuatro plazas, llega a 300 km/h
La suspensión delantera es de diseño específico y fue aprobada por los ingenieros de Williams. Se necesitó ampliar la trocha (2.715 mm contra los 2.580 mm del vehículo de serie) para alojar a los neumáticos Michelin Racing (26/65 x 18" adelante y 36/71 x 18" atrás), montados en llantas Ronal de 18 pulgadas. El despeje del Espace F1 es de 100 mm, y su fondo está cubierto por una superficie plana con extractor, repitiendo la aerodinámica de los F1. Para una buena refrigeración del motor, los radiadores están en el frente y poseen ventiladores para enfriarlos a bajas velocidades o cuando el vehículo está parado. Con los 1.100 kg de peso, el Espace F1 ofrece prestaciones muy cercanas a las de un monoposto de competición. Acelera de 0 a 200 km/h en 6.3 segundos, alcanzando unos 300 km/h de velocidad máxima y asombra frenando: tan solo 80 metros para pasar de 300 a 70 km/h, con sus cuatro discos de carbono.
Pasarruedas ensanchados con aspecto de pontones. Allí se alojan neumáticos de generosas dimensiones
El look del Espace es, lógicamente, más agresivo por las importantes tomas de aire frontales para la refrigeración del motor y los frenos. El carenado de las ruedas, en kevlar, es semejante a los pontones laterales de los F.1. Un importante spoiler trasero con balizas, hace pensar que se lo utilizará como como safety car para los Grandes Premios de F.1. En el interior abundan los materiales compuestos. Cuatro butacas realizadas en fibra de carbono enmarcan al V10, recubierto para reducir el ruido y la temperatura del interior. El tablero es idéntico al de serie, pero también es de carbono, como los revestimientos de las puertas. Con todo, este Espace F1 refleja qué tienen Matra y Renault en común; pasión por la competición y la innovación