Revista Ases y Motores 45. Octubre de 1956
El interés que en nuestro medio reina en torno a la fórmula tres del automovilismo internacional "monoplaza hasta 500 c. c. con alimentación normal" y que fuera debidamente comentado a través de una realización de Juan Salatino en ASES Y MOTORES tiene y tendrá otras exteriorizaciones acercándonos al ideal de colocar muy pronto a nuestros aficionados ante competencias para la categoría entre pequeños pero veloces "racers", a modo de caldo de cultivo para alimentar la vigorosa llama de la pasión por los deportes mecánicos.
Con relación a las producciones que están ya en funcionamiento, podemos referirnos hoy a la que proviene del taller de un aficionado cordobés, el señor Juan R. Bauque, de La Tablada, Córdoba, que según sus declaraciones estuvo trabajando tres años impulsado por su deseo de alcanzar el prototipo cuyas características exteriores se podrán apreciar en la foto adjunta.
Se trata de un monoplaza al que se ha carenado por completo dándole un atractivo aspecto de coche sport y que en la actualidad está equipado con un motor Ariel de 4 cilindros, modelo 53 de 998 c. c. que con nafta común y compresión normal puede alcanzar los 35 HP a 5.600 r.p.m. Naturalmente, para adaptarlo a la fórmula deberá ser equipado con un motor de 500 c. c., lo que según su constructor puede lograrse sin modificaciones, debiendo servir de base el rendimiento alcanzado en comprobaciones contra reloj las que arrojaron un promedio de 146 km/h para el kilómetro. El peso total de la máquina cuya carrocería está hecha en chapa de hierro de 0.9 m/m. es de 378 kgs., que puede reducirse si se usa aluminio y plástico en la carrocería.
Otros detalles técnicos son los siguientes: largo total: 3.400 mts.; distancia entre ejes, 1,995 m; trocha delantera, 1,182 m; trocha trasera, 1,168 m; altura máxima, 0,84 m. ; altura mínima, 0,08 m.; rodado, 400 x 18; capacidad combustible, 38 litros en dos tanques laterales que abastecen simultáneamente; capacidad de aceite, cinco litros en un solo tanque; frenos, hidráulicos en las cuatro ruedas; suspensión delantera, a eje rigido con elástico transversal y dos amortiguadores hidráulicos telescópicos; suspensión trasera, independiente con ballestas longitudinales y dos amortiguadores hidráulicos telescópicos; transmisión, a cadena y diferencial herméticamente blindado a baño de aceite constante y montado sobre cuatro rulemanes de doble bolillero y oscilantes; instrumental, cuenta revoluciones, velocímetro, temperatura de aceite, presión de aceite, amperímetro y termocupla (temperatura de cabeza de cilindros). El consumo con motor de un litro es de 240 kmts., con 20 litros según control efectuado al efecto.
La máquina en otro orden de cosas significa una magnífica expresión de lo que puede hacerse cuando se persigue el ideal como única meta. Las líneas de la carrocería responden a las más modernas exigencias de la técnica especializada y presentado como coche sport, la máquina nada tendría que envidiar, siempre atentos a sus características técnicas y a lo reducido de la cilindrada, a aquellas que se producen en la fórmula para el mercado.
Esta es pues otra de las máquinas que pretenden resultar la avanzada de la fórmula tres a la que habrán de incorporarse otras más en breve en razón de haber llegado a nuestro conocimiento que Clemar Bucci prepara diez unidades del tipo Cooper-Brístol cuyo precursor en nuestro medio resulta Juan Salatino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario