Por J.C. Perez
Revista Ases y Motores Nro 99. Julio de 1961
Luego de muchos años de ansiosa espera, el hombre medio argentino tiene nuevamente la posibilidad de realizar su sueño dorado: comprarse un automóvil. Mucho tiempo pasó para que ese anhelo normal pudiera ser concretado y aunque todavía no hemos llegado al nivel de otros países, la radicación de varias plantas de montaje, que serán fábricas en el futuro, y un mejoramiento en el nivel de vida, contribuyen para que nuestro pueblo recupere paulatinamente la conciencia automotriz que una vez tuvo.