Vaifro Meo y su "Kreidler - Meo" en Bonneville
Revista Automundo Nro 33. Noviembre de 1965
Tres marcas obtenidas recientemente en las salinas de Bonneville colocaron otra vez a la Argentina en el marco de los récords mundiales de motociclismo. Nuestro representante, Vaifro Meo, y el piloto alemán Rudolf Kunz, a bordo de máquinas construidas ex profeso en el país y equipadas con motores alemanes, de la marca Kreidler, de 50 centímetros cúbicos de cilindrada, llevaron a cabo estos intentos, logrando superar las marcas anteriores del kilómetro lanzado con 210,634 km/h, de la milla con partida lanzada con 209,215 km/h, y de los 10 km con partida detenida, con 180 km/h.
La pista de Bonneville, situada a ocho kilómetros del pequeño poblado de Wendover y casi a 200 kilómetros de Salt Lake City, capital de Utah, es uno de los pocos lugares del mundo donde se pueden obtener las velocidades más grandes de la tierra.
Allí se realizan, todos los años, reuniones en las que se miden los constructores profesionales y los aficionados, alcanzándose, en muchas oportunidades, resultados sorprendentes. Los automóviles "convencionales", las motocicletas, los bólidos a reacción, de tres o cuatro ruedas, logran allí límites que representan nuevos hitos en la constante evolución técnico-deportiva.
Recientemente, el motociclismo argentino obtuvo un triunfo de importancia mundial en las famosas salinas: la máquina "Kreidler-Meo", de 50 centímetros cúbicos de cilindrada, superó los más descollantes récords internacionales de su categoría.
En efecto, tras varios años de paciente labor, el conocido motociclista Vaifro Meo, de 36 años de edad, ex campeón argentino en la clase "125 centímetros cúbicos" y ex récordman mundial en la "50 centímetros cúbicos" (la más pequeña de las clases reconocidas oficialmente por la Federación Internacional de Motociclismo), terminó, en este año, la preparación y puesta a punto de una máquina totalmente "carenada" y de diseño revolucionario, con la cual se proponía reconquistar, para la Argentina, los récords mundiales de la clase "50 centímetros cúbicos" en el kilómetro y la milla lanzados, récords que ya estuvieron en su poder por haberlos obtenido en los años 1952 y 1955, y que le fueron arrebatados luego por el corredor alemán Muller, con la famosa NSU-"Baum ID'', con compresor.
La empresa no era nada fácil si se tiene en cuenta que la NSU había establecido, en la misma pista de Bonneville, un promedio de 196 kilómetros por hora, con un pequeño motor de tan solo 50 centímetros cúbicos, logrando, además, una velocidad máxima de 204 kilómetros por hora.
La "Kreidler-Meo"
La máquina que Vaifro Meo llevó a los Estados Unidos, en esta oportunidad, fue diseñada y construida íntegramente en el país. Los principales, colaboradores de esa extraordinaria realización fueron, además del propio Vaifro Meo, los técnicos Roberto Perales y Tarcisio Ravazzi. El motor, en cambio, fue fabricado en Alemania por la firma Kreidler. De allí el nombre de la máquina: "Kreidler-Meo".
Solamente una serie de circunstancias fortuitas impidieron, a último momento, que la misma fuera piloteada durante las tentativas de récords por Vaifro Meo, piloto oficial que había realizado todas las pruebas preliminares en el aeropuerto internacional de Ezeiza. Los nuevos récords fueron establecidos por el piloto de reserva, Rudolf Kunz.
La motocicleta, que llevaba los colores argentinos y de Alemania Occidental, tiene la forma de un cohete y las siguientes dimensiones: 3:20 m de largo y 0,50 m de diámetro. Su altura máxima desde el suelo es de 0,65 m, aproximadamente. Su rodado es de 250 x 16. Cambio de 8 velocidades, accionadas eléctricamente; motor de dos tiempos refrigerado por agua y hielo; 40 milímetros de diámetro de pistón, con un recorrido de 49,7 mm; compresor rotativo; combustible a base de alcohol. El pequeño motor, de tan solo 50 centímetros cúbicos, desarrolla una potencia de 15 HP (300 HP por litro) a un régimen de 15.000 revoluciones por minuto.
Récords
Los récords conquistados fueron los siguientes (todos en la Categoría Internacional "A", Clase 50 cc):
1 KM CON PARTIDA LANZADA promedio: 210,634 kilómetros por hora. (Récord anterior: 196 km/h, establecido por Muller el 9 de agosto de 1956, con una NSU con compresor. en Bonneville).
1 MILLA CON PARTIDA LANZADA promedio: 209,215 kilómetros por hora (récord anterior: 196 kilómetros por hora, establecido por Muller con la misma máquina y en el mismo lugar).
10 KM CON PARTIDA DETENIDA promedio: 180 kilómetros por hora (récord anterior: 153,452 km/h, establecido por Volker Kramer el 13 de mayo de 1965, con Zundapp, en Monza. Anteriormente, la marca mayor la tenía la NSU -1956- con 134 km/h y luego le Kreidler -1964- con 151 km/h).
Destacamos que el mejor promedio registrado en Bonneville por la máquina "Kreidler-Meo" fue de 225 kilómetros por hora (marcado en el regreso de la milla lanzada). Como se sabe, los récords se hacen en dos "pasadas" (ida y vuelta) y se toma luego el promedio.
Estos récords han sido controlados y fiscalizados por la Federación Internacional de Motociclismo (FIM), y tienen un gran significado para nuestro deporte, pues es la culminación de un esfuerzo de técnicos y mecánicos de nuestro país.
Vaifro Meo, que el día 2 de febrero de 1952 logró obtener, en la pista de Ezeiza, el primer récord mundial, al establecer para el kilómetro lanzado una marca de 92 kilómetros por hora, con una motocicleta "carenada" de nombre "Alpino-Perales", de 50 centímetros cúbicos, inicia así el ciclo de una serie de marcas que lo colocaron en el plano de las figuras internacionales. Desde aquella época, Meo siguió estudiando la posibilidad de conquistar nuevos récords para nuestro país, culminando sus estudios a fines del año pasado, en que decidió intentar nuevas mareas.
Con el patrocinio del gobierno de Córdoba, se estudió la posibilidad de realizar estos intentos en las salinas del norte de la mencionada provincia, en su límite con Catamarca y Santiago del Estero, estableciendo el campamento en Totoralejos. Todo se llevó a cabo sin ninguna publicidad, pero las condiciones climáticas resultaron adversas, siendo necesario, entonces, trasladarse a la pista de Bonneville.
Pistas sudamericanas
"Las salinas de Bolivia y Chile no son las únicas pistas potenciales para récords de velocidad terrestre en Sudamérica", nos dice Vaifro Meo. "Lugares similares de la Argentina nos hacen pensar que las pistas para estos récords, verdaderamente grandes y rápidas, están aún vírgenes y esperando".
Desde 1958, Vaifro Meo comenzó a explorar las posibilidades de aquellos lugares en nuestro país. Después de haber analizado los principales, llegó a la conclusión de que "Bonneville me parece muy pequeña con sus escasas 10 millas de carrera útil". Las más amplias, y probablemente mejor situadas, de las planicies argentinas con las dos cercanas a las Salinas Grandes, "cada una de más o menos 60 millas de longitud por 30 de ancho". Están a unas 620 millas del NO de Buenos Aires y alrededor de unas 100 millas de la ciudad de Córdoba. La Ruta Nacional 60 bordea a una y un ferrocarril termina en la otra, facilitando el trasporte.
"Contrariamente a Bonneville, sus superficies son vírgenes, no dañadas y a una altura de unos pocos cientos de pies sobre el nivel del mar. Están secas durante el invierno y la temperatura normal oscila alrededor de los 32 y 50° F."
Vaifro Meo nos confirma que son "extremadamente suaves y su preparación resultaría más simple y barata que en Bonneville y mucho más aun que en Lago Eyre". En su exitosa visita de octubre último, los recordmen Art Arfons y Bob Stunmers le manifestaron, a nuestro representante, su entusiasmo por conocer las famosas planicies argentinas. Es posible que muy pronto las salinas de Córdoba sean escenarios de las orgías de velocidad más grandes del mundo.
Roberto Perales. Preparador del motor y diseñador de la carrocería
Bonneville 23/10/1965. Para el gran amigo Roberto, creador de esta maravilla que hizo posibles estos nuevos récords, con todo afecto y agradecimiento, Vaifro Meo
Vaifro Meo junto al aparato de record. Los records mundiales fueron conseguidos en su intermedio
El diminuto pistón de 40 mm de diámetro perteneciente al motor de 50 cm3 de cilindrada del "Kreidler Meo"
El motor de origen aleman marca Kreidler se encuentra en la parte posterior de la máquina
El pequeño motor de dos tiempos de 50 cm3 de cilindrada es refrigerado por agua y hielo
Con el "Kreidler Meo" se logró superar las marcas de kilómetro y milla con partida lanzada y de 10 kilómetros con partida detenida
El Kreidler Meo en las salinas de Bonneville
La Kreidler Meo en el Museo Juan Manuel Fangio
Increible logro! Ademas de la moto 2T esta el desarrollo aerodinamico de toda la carroceria que le pusieron arriba sin la cual saldria flameando.
ResponderEliminarFelicitaciones a quienes pueden llevar a cabo sus sueños y no se quedan con el pesimismo del nah nosepueeede....
Cuando hay guita los sueños se vuelven realidad y la ingenieria del proyecto parece que fue germana.
EliminarAsi cumplir los sueños es facil, econonómico NO.