Con el techo cerrado no es tan vistoso, pero abierto es espectacular. Este Peugeot 206 cabrio circula por las calles de Río Cuarto. Objeto de deseo tituló la Revista Parabrisas en su test y no podía estar mas acertada esa definición.
Se lo ve hermoso, el color pasa, al ser un auto chico lucía mas en colores claros.
Rupturista, revolucionario, marcó el fin de las cabrio con lona por los "cupés-Cabrios" con su Techo rígido plegable.
Como toda tendencia hoy entran como piezas de museo, donde la gente cada vez de esconce mas, sea atrás de un polarizado, o fuera del auto detrás de un trapo.
Felicitaciones al dueño de semejante belleza de diseño. Incluso conserva el deflector delantero debajo del paragolpes.
Se lo ve hermoso, el color pasa, al ser un auto chico lucía mas en colores claros.
ResponderEliminarRupturista, revolucionario, marcó el fin de las cabrio con lona por los "cupés-Cabrios" con su Techo rígido plegable.
Como toda tendencia hoy entran como piezas de museo, donde la gente cada vez de esconce mas, sea atrás de un polarizado, o fuera del auto detrás de un trapo.
Felicitaciones al dueño de semejante belleza de diseño. Incluso conserva el deflector delantero debajo del paragolpes.
Solo una palabra puede definirlo: HERMOSO
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