sábado, 5 de octubre de 2024

Noticias de ayer: Inauguración del Museo Juan Manuel Fangio en Balcarce


Revista Automundo Nro 6. Año 1986

Después de muchos esfuerzos, contando con innumerables aportes y colaboraciones, fruto del trabajo, de la perseverancia, a veces de la obstinación, ha quedado inaugurado en Balcarce el Centro Tecnológico Cultural y Museo del Automóvil Juan Manuel Fangio. destino final de los vehículos, trofeos y distinciones que el quíntuple campeón mundial de automovilismo acumuló a lo largo de toda una vida de gloria y hazañas

Orgullosamente iluminado "a giorno" relumbrante en todos sus detalles, rebosante de felicidad en los hombres que lo transitan incansablemente, allí está -en la esquina balcarceña de Mitre y Dardo Rocha- el Museo Juan Manuel Fangio, hogar definitivo de los tesoros que el único hombre en el mundo que fue capaz de alcanzar cinco títulos mundiales de Fórmula 1 deja para la posteridad. 

"Sólo puedo decir que estoy emocionado y agradecido. Ya antes me han escuchado afirmar que, a esta altura, uno está más cerca del final que del principio. Por eso esto me da una gran tranquilidad, quería verlo terminado, funcionando. Espero que todo lo que aquí se exhibe sirva de ejemplo para los jóvenes. A ellos, fundamentalmente, está dedicado..." Palabras de Fangio. 
Como no podía ser de otro modo, en el instante en que todo es alegría, brillo y trajín, Juan Manuel hace gala de aquellas dos virtudes que lo distinguieron y llevaron al triunfo: la humildad y su sentido exacto de la medida. 

El museo de Fangio, erigido sobre la base del edificio donde funcionó durante muchos años el Concejo Deliberante y que fuera construido originalmente en el año 1906, puede ya visitarse. Exteriormente ha sido restaurado en todos sus detalles, conservando incluso el monumental pórtico original de cinco metros de altura y reconstruyendo cuidadosamente las molduras de sus dos fachadas, las rejas de ventiluces y herrajes. 

En el interior, la historia da paso a lo moderno merced a la estructura de hormigón armado ideada por los arquitectos Eduardo Alvarez Manzaneda y Jorge Trivigno, que constituye un largo plano inclinado en espiral desde la planta baja hasta los 7,30 metros de altura. Es esa rampa la que da acceso a las seis bandejas de exposición. que en total representan 1564 metros cuadrados de superficie. 

Allí están. entre otros el Simca-Gordini con el que se mató Wimille y otro auto gemelo, vehículos que Fangio y Benedicto Campos corrieran en Europa, un Chevrolet 1928 idéntico al que el quíntuple utilizó para debutar como acompañante en 1929, varios autos de calle que le fueron obsequiados por personalidades o empresas, el Chevrolet 1940 del Gran Premio Internacional del Norte. el Volpi-Chevrolet de Mecánica Nacional Fuerza Libre con el que se proyectó hacia las carreras de pista, la -Coloradita- de Bordeu, el Renault Turbo de Fórmula 1 que Alain Prost corrió en la temporada de 1982

Dos vehículos, ambos Alfa Romeo 308 de 1947, ocupan un lugar en el museo sólo transitoriamente. Uno de ellos viajará pronto a Europa para pasar a integrar la colección del conde Giovanni Lurani, quien en canje enviará una Maserati 250 F idéntica a la que usó Fangio para conquistar, en 1957, su último campeonato mundial. 

El otro Alfa, que perteneció a Oscar Alfredo Gálvez, es la pieza que falta en el museo de Alfa Romeo en Milán, hacia donde irá en canje por una de las legendarias "Alfettas" con que "el chueco" octuvo su primera conquista ecuménica en Formula 1, el año 1951. 

A estos autos se agregan los centenares de trofeos y distinciones conquistados por Fangio en su larga y exitosa trayectoria. la mayor parte de los cuales Juan no conservaba en su poder, sino que sabiamente los había dado en carácter de préstamo a muchos de sus amigos, quienes orgullosamente cumplen hoy su pacto de devolverlos intactos. 

El museo de Fangio está entre nosotros, y nada mejor que la palabra del campeón para intentar definir su futuro: "Tengo la esperanza de que los objetos aquí expuestos sirvan para incentivar el entusiasmo por un deporte que no parece tener límites de velocidad, pero que siempre debe cimentarse sobre valores permanentes de hombría, valor, nobleza y honradez, dado que en él se expone la vida, aún cuando el triunfo es de las máquinas"

Estas palabras, recogidas del párrafo final del acta de cesión de todos sus trofeos a la Comisión Pro-Museo, firmada el 18 de marzo de 1983 ante el escribano Alejandro Tachella Costa, sintetizan fielmente el propósito del legado que hace al automovilismo nacional el más grande deportista argntino de todos los tiempos.


Juan Manuel Fangio y un sueño hecho realidad, la apertura de las puertas de un museo "que es todo del pueblo"


Una joya del ACA. Un Schacht construido en el año 1906




El Mercedes Benz 1957 que la casa germana le regaló a Fangio


Una pieza fundamental del museo, el Alfa Romeo 308 de Oscar Galvez que ocupará un lugar de relevancia en la bandeja del automovilismo nacional


En el museo de Fangio no podía faltar la cupé Ford TC de su gran amigo y rival Oscar Alfredo Galvez


La Coloradita de Juan Manuel Bordeu, parte de la historia de nuestro TC


Detalle del Volpi Chevrolet Mecánica Nacional de Fangio


El Brabham BT36 con el que Reutemann corrió en la Fórmula 2 europea


Renault presente en el museo con su RE30 de Fórmula 1, que corrió Alain Prost en la temporada 1982


Reliquia del ACA a préstamo. Un Wanderer de 1911


Este Peugeot de 1904 que se exhibe en el museo, es propiedad del ACA


La maqueta del complejo edilicio que alberga a partir del 22 de noviembre los tesoros de Fangio


La cupé 1939 con la que el quintuple campeón mundial obtuvo sus primeros triunfos

La comisión

El ingeniero Luis Carlos Barragán, actualmente secretario de Obras Públicas de la municipalidad de Balcarce, es quien presidió en su última etapa de vida la Comisión Pro-Museo Juan Manuel Fangio, integrada por un grupo de amigos dilectos del quíntuple campeón mundial. Juan Manuel Bordeu, Carlos Alberto Alvarez, Raúl Norberto Burgués, Jorge González Alvarez, Alí Musa, Héctor Galella, Carlos Kiricos y Néstor Miguel, forman el resto del grupo que contó con la colaboración permanente de Ernesto D'Amico, Carlos Fernández Castro y Osvaldo Cabanas

Todos ellos, seguramente, guardaron un instante de recogímiento en la jornada de inauguración del museo para recordar a Atilio F. Barragán, el único de los gestores de la obra que no pudo llegar a verla terminada, pues un accidente automovilístico ocurrido un año atrás tronchó su vida. 

La comisión, que finalizó su gestión con la inauguración del museo, no ha terminado sin embargo su tarea, pues a partir de aquí sus integrantes y otros hombres que a ella se incorporen constituirán la Fundación Juan Manuel Fangio, encargada de cuidar y enriquecer la obra realizada. 

Juan Manuel Bordeu, discípulo y amigo de Fangio, será quien desde la presidencia de la Fundación, tendrá ahora la responsabilidad de conservar lo hecho y recoger las propuestas que conducirán a una permanente actualización y mejoramiento del museo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario