jueves, 3 de diciembre de 2015

Renault 19 RT 1.8 Automático


Efecto sedante
Revista Motor 16 Nro 521. Año 1994

El motor de 1,7 litros de 95 caballos há sido elegido por los ingenieros de la marca para acoplarle el nuevo cambio automático de asistencia electrónica AD4. La razón estriba seguramente en sus consumos, mucho más ajustados, y en que la inyección monopunto se adapta mejor a una curva de par uniforme y sin pendientes acusadas, algo que se combina mejor con el particular funcionamiento de un cambio automático. 
Lo cierto es que esta mecánica se ha mostrado igual de brillante con esta nueva transmisión. La asistencia electrónica permite dos programas diferentes por los que se puede optar pulsando una doble tecla en la base de la palanca de cambios. El C ó «confort» actúa de forma más tranquila y a regímenes bajos, con lo que el consumo baja considerablemente. Una vez en carretera, si se quiere optar por respuestas más enérgicas, el programa S ó «sport» hace que el cambio estire más el régimen de giro en busca de mejores aceleraciones y recuperaciones.
Además, y como en la mayoría de los cambios automáticos modernos, la palanca de selección del cambio admite un uso manual a la hora de las reduccionés, ampliando las posibilidades de conducción en carreteras de montaña. Para circular normalmente por carreteras nacionales, el kick down actúa cuando se acelera a fondo en caso de necesidad y la transmisión manda entonces toda la potencia disponible a las ruedas. 
Por todo ello, el R-19 no pierde un ápice de su personalidad y, si bien lógicamente no consigue las mismas prestaciones en cuanto a velocidad máxima y aceleraciones que la versión manual, la supera infaliblemente en recuperaciones. 
Otro factor importante y que siempre ha perjudicado a los automáticos frente a los manuales es el consumo, algo más elevado siempre en los primeros. En el caso del Renault 19, la inevitable diferencia se mantiene en unos márgenes muy aceptables, aunque siempre consuma más que el manual. 


2 comentarios:

  1. Nuestro mercado siempre escapó a los automáticos. Caros de mantener y reparar, poca mano de obra calificada, poco interés en adaptar el manejo al automático, en especial estacionar.

    Paso siempre y con las CVT no hay excusas por lo simples, pero nadie los quiere. Y la mejor prueba es el mercado de usados, se demora mucho mas en venderse. Si es que se venden.

    ResponderEliminar
  2. Buenas, cómo puedo saber que números de chasis o cuántas unidades se vendieron del automático en Argentina?

    ResponderEliminar